Ana Ojeda es osteópata, kinesióloga y terapeuta somática. Su mirada está orientada al cuerpo y a cómo el sistema nervioso, la respiración y el trauma impactan en la vida cotidiana.

¿Por qué volver al cuerpo y entender dónde se alojan nuestras emociones?

Para poder generar cambios necesitamos saber dónde estamos parados primero. Estar en el cuerpo es estar en el presente, conectar con emociones para, desde ahí, sentir lo que necesito.

Una frase de su libro

“No todo evento traumático significa un trauma, ya que el trauma no está en el evento sino en el sistema nervioso”.

¿Cómo llega el trauma a alojarse en el sistema nervioso?

Cuando el cuerpo no tuvo lugar para expresar lo que necesitó frente a ese evento traumático, puede quedar atrapado en un estado de lucha, huida o congelamiento. Luego esto se manifiesta en síntomas físicos y emocionales: aumento o disminución de la tensión muscular, hipervigilancia, desconexión, insomnio, irritabilidad, dolores crónicos, problemas digestivos, miedo, sensación de inseguridad, imposibilidad de establecer límites, entre otros.

El diafragma como “músculo impulsor de vida”

Si el diafragma se deja de mover, dejamos de respirar.
Si se mueve poquito, sentimos poquito.
Si se mueve con amplitud, mejora digestión, circulación, conexión, restauración, oxigenación, postura, movimiento y descanso.
Un diafragma libre nos permite conectar con nuestras emociones, sentir lo que necesitamos y, en definitiva, transformarnos.

Sistema nervioso flexible

Un sistema nervioso flexible es un sistema nervioso regulado: la capacidad de fluctuar por todos los estados, es decir, capacidad de cambio.
No se trata solo de estar en calma o dormir bien; también es poder conectar con las emociones sin desbordarnos, sentir seguridad para expresarnos y poner límites cuando hace falta.

Ana en cinco postales

🌞Un momento del día: cuando nos reunimos a cenar en casa.
🌞Un paisaje en el mundo: un arroyo misionero.
🌞Un aroma: lavanda.
🌞Una planta que la conecta con la infancia: llantén.
🌞Una sensación: expansión.


Para profundizar en el impacto del sistema nervioso, recomendamos leer su libro. También podés visitar su consultorio. Más información en su web: licanaojeda.com.ar.